10 de Septiembre de 2024 
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El grupo industrial alemán ThyssenKrupp perdió 649 millones de euros en el año fiscal 2016/2017, frente al beneficio neto atribuido de 296 millones de euros el año anterior, por la venta de su fábrica de acero en Brasil. ThyssenKrupp informó hoy de que el beneficio operativo bajó en el último ejercicio, que concluyó el 30 de septiembre, un 42 %, hasta 687 millones de euros.
La facturación se incrementó en el mismo periodo un 9 % (42.971 millones de euros) y la entrada de pedidos mejoró un 18 % (44.288 millones de euros).
La dirección y el consejo de supervisión de la compañía propondrán mantener el reparto de un dividendo de 0,15 euros por acción en la próxima junta general de accionistas dada la mejora del resultado operativo y que prevén más mejoras en indicadores de beneficios relevantes.
ThyssenKrupp vendió este año CSA Siderúrgica do Atlántico (CSA) por 1.500 millones de euros (valor de la empresa) y cierra el capítulo del acero en las Américas.
De la venta ha surgido un pago extraordinario y una amortización de 900 millones de euros en CSA.
En 2016 adquirió completamente la fábrica de acero brasileña CSA tras comprar la participación de casi el 27 % de la minera brasileña Vale con la que acordó que en caso de que se venda CSA, Vale recibirá un pago excluidas ganancias.
Sin este efecto extraordinario ThyssenKrupp asegura que el beneficio neto hubiera sido superior al de hace un año.
Las divisiones de componentes para la industria automovilística y la de elevadores tuvieron buenos resultados.
Asimismo la subida de los precios del acero y la reducción de costes de 930 millones de euros también contribuyeron positivamente al resultado.
El presidente de ThyssenKrupp, Heinrich Hiesinger, dijo que el último ejercicio económico fue un año de “decisiones importantes” con la venta de CSA y la creación de una sociedad de riesgo compartido con Tata Steel para las actividades del acero en Europa.
El beneficio operativo en la división de componentes subió un 12 % (377 millones de euros), en elevadores un 7 % (922 millones de euros), pero en soluciones industriales bajó un 69 % (111 millones de euros) tras la caída de la entrada de pedidos los años anteriores.
La división de materiales también mejoró el beneficio un 143 % por la subida de los precios del acero (312 millones de euros).
La subida de los precios también se reflejó en el negocio de acero de Europa, cuyo resultado operativo mejoró un 74 % (547 millones de euros).
ThyssenKrupp ha reducido la deuda neta hasta 2.000 millones de euros (3.500 millones un año antes) por la entrada de efectivo con la venta de CSA y por la ampliación de capital en el cuarto trimestre.
La compañía alemana, que prevé mejorar en 2017/2018 el beneficio operativo antes de extraordinarios y seguir reduciendo costes, añadió que tiene liquidez disponible por valor de 9.100 millones de euros.
