La industria española mantiene su fortaleza y prevé un sólido crecimiento

La Alianza por la Competitividad de la Industria Española, integrada por las organizaciones empresariales ANFAC, AOP, ASPAPEL, FEIQUE, FIAB, OFICEMEN y UNESID, representantes de los sectores del Automóvil, Operadores Petrolíferos, Papel, Química, Alimentación y Bebidas, Cemento y Siderurgia, ha presentado hoy en Madrid, en la sede de Feique, del Barómetro Industrial, Informe elaborado en colaboración con el Centro de Predicción Económica (CEPREDE).

El Barómetro, de periodicidad trimestral, integra dos indicadores de comportamiento de la industria española: uno de análisis predictivo realizado a partir de indicadores de confianza del consumidor y de la economía; y otro de análisis de situación realizado a través de los principales indicadores disponibles sobre la evolución de la economía en general, el consumo, y la producción y precios de los sectores industriales y tractores.

Han intervenido, Mauricio García de Quevedo, Director General de FIAB y Secretario de la Alianza por la Competitividad de la Industria Española; Juan Antonio Labat, Director General de FEIQUE, Julián Pérez, Director General Adjunto de CEPREDE y Andrés Barceló, Director General de UNESID.

Coyuntura
La industria española ha registrado un notable comportamiento en el segundo semestre del año, recuperándose de la ligera desaceleración del segundo trimestre, y experimentando un crecimiento del 2,2% en el cuarto trimestre del año. En términos interanuales, el indicador sintético de coyuntura industrial muestra una mejora del 3,6%. Es la demanda externa la que genera una mejoría en las exportaciones de bienes del 2,6% a cierre del ejercicio, destacando el crecimiento de las exportaciones registradas en la siderurgia, el papel o la química.

En general, la coyuntura industrial se muestra positiva y estable en su comportamiento global, si bien la mayor incertidumbre la genera la caída de los índices de producción de la construcción.

A 12 meses
El indicado predictivo de la actividad industrial se ha mantenido estable durante todo el año 2017, y refleja una situación excepcionalmente positiva en la percepción de las expectativas, tanto de productores como de consumidores. La mejor expectativa de comportamiento en 2018 la presenta la construcción, experimentando crecimientos, superiores al 30%, en las tendencias de pedidos, índice de producción y periodo de trabajo asegurado.
El clima mejora un 7,3%, apoyado en las expectativas de producción (+3,1%), si bien se advierte el deterioro en la previsiones de la cartera de pedidos para 2018, respecto a la que se previó para 2017, esencialmente en relación a los pedidos provenientes de terceros países.
Sin embargo, dado los buenos resultados del resto de indicadores, el deterioro presenta más una previsión de desaceleración respecto al excelente comportamiento registrado el pasado año.