Trabajadores de la planta de A Coruña de Alcoa se concentraron ante la Autoridad Portuaria de Vilagarcía para protestar por la entrada masiva en España de aluminio primario extranjero, mientras ellos están parados y con la amenaza del cierre de la actividad, tal y como se recogen el la prensa local.
Vilagarcía es, junto a Vigo y Marín, uno de los principales puertos gallegos de entrada para el aluminio primario que se produce en países como Arabia Saudí, Rusia o Mozambique. Y la propia Alcoa está comprando gran cantidad de ese mineral, mientras mantiene cerrada la factoría de A Coruña al entender que la producción ya no es rentable.
Vilagarcía es, junto a Vigo y Marín, uno de los principales puertos gallegos de entrada para el aluminio primario que se produce en países como Arabia Saudí, Rusia o Mozambique. Y la propia Alcoa está comprando gran cantidad de ese mineral, mientras mantiene cerrada la factoría de A Coruña al entender que la producción ya no es rentable.
“Solo por el puerto de Vigo entran unas 150.000 toneladas, que es lo mismo que se produce en Avilés”, manifestó el presidente del comité de empresa de Alcoa, Juan Carlos López. Según sus cifras, los barcos mercantes descargan en los puertos gallegos unas 300.000 toneladas, lo que equivaldría, “a la producción de aluminio primario en España durante un año”.
Los trabajadores de la multinacional consideran que están siendo víctimas de una competencia desleal feroz, ya que las exigencias medioambientales, energéticas y laborales en países como Arabia Saudí, Mozambique o Rusia no tienen nada que ver con las que se aplican en España al dictado de la Unión Europea. “Podemos demostrar que somos competitivos, pero si empleamos todos las mismas armas”, añade López.