Por su parte, la siderurgia china registró una producción de 1.053 Mt, equivalente a un crecimiento de 5,2%, así lo informó la Asociación Latinoamericana del Acero (Alacero).
En América Latina, Chile fue el país con el mejor desempeño con 1,2 Mt y un incremento de 2,1%; en el otro extremo está Perú, con una disminución de 40,6% y 732.000 toneladas. La producción total de acero laminado bajó un 9,7%, llegó a 46,3 Mt, similar a la producción del año 2003 y alejada del mejor dato en 2013, de 57,5 Mt. La caída mayor de producción de laminados para las principales economías en porcentaje se dio en Argentina con un -18,8% (total de 3,5 Mt para 2020), y en volumen en México, con una caída de -1,7 Mt (-9,9% y volumen de 15,8 Mt). En tanto, Brasil cerró con -3,7% (21,7 Mt).
El consumo de acero, por su parte, refleja la mejoría de la economía regional, registrando en noviembre de 2020 un aumento del 6%, comparado contra el mismo mes del año pasado a 5,5 Mt y sin haber registrado un mes de esta magnitud desde octubre de 2019. Se estima que se podrá mantener ese desempeño durante el primer trimestre de 2021.
En noviembre de 2020, la participación de las importaciones en el consumo cayó y la expectativa es que el consumo regional vuelva a crecer con el déficit comercial controlado. En noviembre, la balanza comercial acumulada registró un déficit un 13,5% menor que los primeros 11 meses de 2019 (-12,4 mil t).
Alacero prevé adelantar algunos resultados de una nueva investigación realizada por el doctor Germano Mendes de Paula, que será dada a conocer en el corto plazo, en el que se advierten los riesgos de las diferencias competitivas de Argentina, Brasil, Colombia y México con países de Asia como Corea del Sur, India, Vietnam y principalmente China, y el riesgo que esto representa para la cadena de valor metalmecánica de la industria del acero en América Latina.
El estudio, titulado “Asimetrías Competitivas, Desindustrialización, Cadena e Industria del Acero”, muestra cómo dichas diferencias en variables de competitividad como tributación, educación, logística y financiamiento están socavando el futuro de la industria siderúrgica en la región. En este contexto de grandes asimetrías competitivas, la defensa de la cadena metalmecánica y de la industria del acero de Latinoamérica es fundamental para mantener actividades que tienen elevados grados de encadenamiento y de generación de empleos de alta calidad.
Francisco Leal, director general de Alacero explicó que “en 2019, de acuerdo con información proporcionada en el estudio sobre el impacto de las importaciones de acero directas e indirectas de China, la continuación de la pérdida de empleos en la cadena metalmecánica de América Latina resultante de la desindustrialización es un tema que debemos considerar crítico”.
Por esto, “Alacero llama a fortalecer la recuperación económica a través de promover la inversión privada y extranjera, reducir el costo país en aspectos como impuestos y logística, estimular la infraestructura y fortalecer la cadena de valor metalmecánica, lo que deberá reducir las asimetrías competitivas existentes”, concluyó.