El Ministerio de Energía, Turismo y Agenda Digital ha aprobado la orden que modifica el sistema de la interrumpibilidad, el mecanismo por el que los grandes consumidores de electricidad reciben un incentivo por modular su consumo en momentos de saturación en el sistema eléctrico, limitando así a cinco meses el periodo que cubrirá la próxima subasta, en lugar de la adjudicación por un año, como venía siendo habitual.
Según consta en la nueva orden publicada en el Boletín Oficial del Estado (BOE), que modifica la anterior, el periodo de entrega para el procedimiento de subastas será el comprendido entre el 1 de enero y el 31 de mayo de 2018.
No obstante, el gabinete dirigido por Álvaro Nadal abre la puerta a que posteriormente puedan celebrarse otras subastas durante la temporada eléctrica 2018.
El Gobierno justifica esta limitación temporal en la necesidad de adaptar el servicio a las exigencias requeridas por la Unión Europea y porque entrará en vigor el nuevo marco regulatorio europeo en 2018 que introducirá nuevos cambios.
Asimismo, se incluye la novedad de activar el servicio de interrumpilidad por criterios económicos. En este caso, el operador hará que entre en juego la interrumpibilidad si es más barata que los servicios de ajuste del mercado diario.
En este caso, la aplicación del servicio de interrumpibilidad por criterios económicos se realizará por cantidades mínimas de 200 megavatios (MW) y máximas de 500 MW en cada hora, de acuerdo con el cumplimiento de algunas condiciones.
Además, en caso de su activación por este criterio, entre los adjudicatarios del servicio se establecerá un sistema de turnos rotatorios como criterio de orden para requerir su activación.
EXCLUYE LAS INSTALACIONES HIDRÁULICAS Y RETRIBUCIÓN FIJA Y VARIABLE
Asimismo, en la orden se excluyen del ámbito de aplicación del servicio de disponibilidad las instalaciones de generación hidráulica, debido a la escasez actual de las reservas y a la incertidumbre futura sobre la evolución de las precipitaciones.
Por otra parte, la retribución del servicio de interrumpibilidad estará constituida por dos términos, uno fijo asociado a la disponibilidad de potencia y otro variable asociado a la ejecución efectiva de una opción de ejecución de reducción de potencia.
LA CNMC ADVIRTIÓ SOBRE SU ELEVADO COSTE
La pasada semana, la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) ya criticó esta propuesta de Orden del Ministerio de Energía, al considerar “elevado” el coste del sistema de interrumpibilidad eléctrica, “apenas utilizado”, y propuso que se justificase su necesidad.
El organismo presidido por José María Marín Quemada consideró que las subastas de interrumpibilidad son “complejas”, que sus costes triplican las del gas y electricidad y que algunos productos (90 MW) favorecen a las grandes industrias.
SUBASTA ENTRE EL 18 Y 22 DE DICIEMBRE
Según el calendario publicado en una resolución el pasado mes de octubre, la subasta de interrumpibilidad de este año se celebrará entre los próximos 18 y 22 de diciembre.
En las pujas, los grandes consumidores de electricidad lanzarán ofertas por entre 6 y 10 bloques de 90 megavatios, que suman entre 540 y 900 MW, y por entre 340 y 412 bloques de 5 MW, que suman entre 1.700 y 2.060 MW.
Según el texto, el precio de salida para cada megavatio del bloque de 5 MW será de 150.000 euros, frente a los 270.000 euros por cada megavatio del bloque de 90 MW.
En ambos casos supone una rebaja respecto a la subasta procedente, cuando el precio de salida en el bloque de 5 MW fue de 160.000 euros y el de 90 MW, de 310.000 euros. Cada uno de los bloques de producto de 5 MW o 90 MW que se pretenda adjudicar será subastado por el administrador en una subasta de precio descendente.