El sector de la construcción se estabiliza y las perspectivas mejoran discretamente durante el primer trimestre de 2023, según el “Informe diagnóstico de la Construcción del primer trimestre del año”.
El documento, elaborado conjuntamente por Royal Institution of Chartered Surveyors (RICS) y el Consejo General de la Arquitectura Técnica de España (CGATE), de acuerdo a una amplia encuesta realizada a profesionales del sector, muestra una moderación en la inflación de los costes de los materiales, que parece estar rebajando cierta tensión en el sector, cuyas expectativas a 12 meses son positivas tanto en residencial como no residencial.
El IAC, en territorio neutral
El Índice de Actividad de la Construcción (IAC) en España volvió a situarse en territorio neutral durante el primer trimestre, recuperando el +1, tras el -12 del trimestre anterior. Y, aunque a nivel europeo, el índice bajó ligeramente hasta los -4, en ambos casos los datos apuntan a un contexto general estable.
En territorio nacional, durante el primer trimestre de 2023 los sectores residencial y no residencial han experimentado un crecimiento de la carga de trabajo, con saldos netos del +31% y el +12%, respectivamente, frente al -11% y -12% del trimestre anterior. Sin embargo, los datos en infraestructuras cayeron hasta el -15%, desde el cero de la última encuesta.
Para los próximos 12 meses, los encuestados prevén una tendencia ligeramente negativa en la actividad de los sectores privado no residencial y de infraestructuras (con un saldo neto de -12% y -7%, respectivamente). También se espera una cierta desaceleración en la carga de trabajo en el sector residencial, con un saldo neto de +11%, 8 puntos por debajo del +19% de la anterior edición. Cabe señalar que las expectativas en el sector residencial privado a 12 meses se han reducido en cierta medida en cada uno de los últimos cinco informes, disminuyendo desde un máximo reciente de +67% en el tercer trimestre de 2021 (antes de la guerra en Ucrania).
El sector parece percibir cierta moderación en el precio de los materiales de construcción. Así, si en la anterior encuesta el 92% destaca este factor, en el informe actual el porcentaje desciende hasta el 41%. También disminuye ligeramente el número de profesionales que considera que el coste de los materiales frena la actividad, un 82% frente al 92% que así lo manifestaba en el trimestre anterior. Este dato (82%) es el más bajo de los recogidos desde el tercer trimestre de 2021.
En consonancia, las previsiones de los costes totales de construcción para el próximo año se reducen del 7% al 4% en el primer trimestre de 2024. En este sentido, las previsiones de inflación de los materiales se redujeron sustancialmente, mientras que las previsiones de los costes laborales (tanto cualificados como no cualificados) se redujeron solo ligeramente. Un dato relevante: el 88% de los participantes señalaron la escasez de mano de obra cualificada como un impedimento para la actividad de la construcción en este primer trimestre, el porcentaje más elevado desde que se inició la serie en el año 2020.
“La falta de mano de obra cualificada es un problema frecuente en construcción. Desde el sector se ha puesto de manifiesto la necesidad de atraer y retener talento joven para renovar una plantilla que envejece sin relevo generacional. Sin embargo, los desafíos de descarbonización y lucha contra el cambio climático ofrecen nuevas posibilidades y nichos de empleo estable que podrían revertir esta situación”, explica Alfredo Sanz, presidente del CGATE.
Expectativas de empleo, sin cambios
Durante el primer trimestre, los encuestados alertaban de un ligero descenso en el número total de puestos de trabajo en el sector, evidenciado por un saldo neto de -6% en este indicador. Aun así, la lectura actual es menos pesimista que la cifra del -16% registrada en el cuarto trimestre de 2022. De cara al futuro, el último balance neto de las expectativas de empleo para los próximos 12 meses se situó en cero, mejorando el -10% registrada la última vez. “Estos datos son coherentes con una perspectiva sin cambios para el empleo en un sector estable”, afirma Sanz.
En cuanto a los costes de licitación, no se estima que vayan a seguir el ritmo del aumento de los costes de la construcción. En este sentido, los encuestados todavía tienen una opinión negativa sobre la evolución de los márgenes de beneficio para el próximo año, con el último balance neto situado en -24% (aunque se mejoran las previsiones del -45%).
“En términos generales, se espera una moderación de los costes de construcción, materiales e, incluso mano de obra (tanto cualificada como no cualificada), acorde con esa percepción de estabilidad en el sector”, concluye Sanz.